top of page

Bajo bombardeos, cristianos en Israel adoran a Jesús y oran por la paz en medio de la guerra con Irán

  • Foto del escritor: Matías Muñoz
    Matías Muñoz
  • 18 jun.
  • 3 Min. de lectura

Mientras los ataques aéreos entre Israel e Irán alcanzan su punto más crítico, imágenes y testimonios conmueven al mundo: grupos de cristianos en Israel se refugian en túneles y búnkeres, cantando alabanzas y declarando el amor de Dios sobre la nación.

ree

El pasado domingo, mientras las sirenas alertaban de misiles en el norte de Israel, personas salieron de sus autos y, en medio del peligro, se unieron en adoración, cantando: “Dios siempre me amó”. No hubo miedo ni caos, solo unidad y fe en medio de la crisis.


El conflicto se intensificó desde el viernes 13, cuando Israel y el régimen iraní comenzaron una de las mayores escaladas de violencia de los últimos años. Israel bombardeó instalaciones de energía en el sur de Irán, mientras Teherán respondió lanzando cientos de misiles y drones sobre ciudades como Tel Aviv, Haifa y Rehovot.

Las cifras oficiales reportan al menos 24 muertos y más de 500 heridos en Israel, incluyendo mujeres y niños. En Teherán, un ataque letal dejó 60 muertos, la mitad de ellos menores de edad.

En medio de la devastación, la fe se hace visible. Videos compartidos por periodistas muestran a cristianos cantando y orando en refugios subterráneos, buscando fortaleza y esperanza en Dios. Testigos relatan que, mientras caían bombas, el pueblo de Dios no dejó de adorar, recordando que la verdadera seguridad viene del Señor y no de las circunstancias externas.

La comunidad cristiana internacional se ha movilizado en oración por Israel, Irán y toda la región. Ministerios como Chosen People Ministries han llamado a interceder por la paz, la protección de los inocentes y la conversión de corazones, pidiendo que la luz de Cristo brille aún en medio de la oscuridad de la guerra.

El clamor por la paz se extiende más allá de las fronteras. Líderes mundiales han pedido calma y diálogo, mientras que en Irán, algunos ciudadanos expresan esperanza de que el conflicto lleve a cambios profundos en el régimen, que lleva 46 años en el poder. Otros, sin embargo, celebran la muerte de líderes iraníes, mostrando la complejidad de las emociones en ambos lados del conflicto.

La Biblia enseña que “la oración del justo es poderosa y eficaz” (Santiago 5:16) y llama a orar por la paz de Jerusalén y por todos los que sufren. En tiempos de guerra, la fe cristiana proclama que solo Cristo puede traer verdadera reconciliación y esperanza duradera, incluso cuando la violencia parece no tener fin.

Los cristianos en Israel, al adorar a Jesús en medio de los bombardeos, dan testimonio de una fe que trasciende el miedo y la incertidumbre. Su ejemplo inspira a la iglesia global a mantenerse firme en la oración, confiando en que Dios puede obrar milagros y transformar incluso los escenarios más difíciles.


La guerra entre Israel e Irán ha dejado cicatrices profundas, pero también ha revelado la fortaleza espiritual de quienes, aun bajo fuego, eligen alabar y confiar en Dios. La esperanza no se apaga cuando el pueblo de Dios se une en adoración, intercesión y servicio a los más necesitados.

El llamado es a interceder por los líderes de ambas naciones, por los inocentes atrapados en el conflicto y por la caída de toda estructura de odio y violencia. Que la paz y la justicia de Dios prevalezcan sobre la guerra, y que la luz de Cristo brille en cada túnel, búnker y corazón que clama por salvación.

Comentarios


bottom of page